¿Qué hacemos con los pibes chorros?

“La impunidad es la madre ,el mejor caldo de cultivo

para que se descomponga el cuerpo social”.Opina Sergio Scarpati Schmid

Mientras nos entretenemos con la “reforma” Constitucional.

¿QUÉ HACEMOS CON LOS PIBES CHORROS?

Así como hoy se difunde una campaña contra la rubéola, otras veces contra la gripe,el uso del preservativo para evitar el SIDA, y tantos otros consejos,parece que se nos ha pasado por alto que el recurrente tema de la “inseguridad y la violencia” tiene su base en la existencia de los “pibes chorros”.

Estos pibes que desde que nacen se cultivan en un ambiente insalubre,con padres alcohólicos y violentos, abandonados a su suerte,son los que luego comienzan a raterear robando stereos y bolsos de los autos ,bicicletas y robos expres en quioskos y casas de familia cuyos dueños están trabajando.

Estos chicos que en los barrios marginales se drogan con “poxiram” y luego con el “paco” (la inmundicia que queda luego de fabricar la cocaína),destruyen su cerebro y son reclutados para integrar bandas que no tienen límite alguno.

Esta es la realidad conocida por todos y frente a la que no se hace otra cosa que servir para llenar las páginas policiales y los noticiosos que atraen la atención de quienes poco les importa más que el futbol o ganar dinero.

Uno de ellos ,empresario él, nos decía que “ desde el 80 que no voto”.-Otro cubrió su patio con rejas y encerró a la abuela con sus pájaros y sus nietos .

”Allí están seguros ,no tengo tiempo ....todo el día trabajamos en el negocio con mi mujer...”
Así es que una gran porción de la población se mantiene indiferente ante esta situación y otra temerosa se encierra entre rejas, restinge sus paseos y se aisla del medio .

La gente tiene miedo.

Con la policía pasa lo que pasa.

Se la deja sin riendas durante años y luego ,como un padre intemperante sin haber hecho nada para corredir a su hijo,echa del hogar a algunos sin distinguir entre el bueno y el malo,con lo que da un mal ejemplo.

Primero su falta de preocupación en la formación, y luego en la arbitrariedad con la que castiga.

En lugar de mejorar la crisis la agrava, porque evidencia su equivocada concepción del problema.
Los mismos policías confiesan que había complicidad con los ladrones y hasta con asaltantes ,con los desarmaderos “a domicilio”, los reducidores ,los proxenetas , el juego clandestino y hasta asaltos con violencia,incluso la muerte de un comisario.

¿Son todos malos los policías?
Es lo mismo que preguntarse si todos los médicos cobran comisiones por recetar ciertos remedios, o si todos los abogados “entregan” a su cliente a la parte contraria por dinero,o si todos los bancos y comerciantes son estafadores.

No ,no son todos, hay algunos, y luego se transforman en muchos, cuando no hay castigo para los malos policías, los malos abogados, los malos médicos y comerciantes.

La impunidad es la madre ,el mejor caldo de cultivo para que se descomponga el cuerpo social.-
¿Y entonces que hacemos?

¿Qué hacemos....?

Nada más ni nada menos que cumplir con nuestros deberes de ciudadanos, de padres,

de vecinos, de hijos y de padres. Epezando con no abandonar a los abuelos en un depósito degradante o a los chicos para que sean pasto de la enfermedidad social del momento.

En Brasil se hacen “vaquitas” para contratar a policías retirados para que asesinen mientras duermes los “pibes chorros” que carcomidos por la droga no tienen contención.

La foto muestra como decenas de adolescentes son exhibidos un domingo en Río para que sus familiares los reconozcan y los sepulten.

Hay padres que lloran de dolor,pero reconocen que es mejor que esten enterrados porque les robaban su dinero,sus enseres,los golpeaban, para comprar alucinógenos.

¿Será algún día esta una solución para San Luis?

¿O habrá que discutir entre todos que hacemos para prevenir el delito?

Otros pueblos ha superado este fenómeno.

El intendente de Nueva York, Rudolf Guliani ganó la batalla con un equipo inteligente y con la participación ciudadana.

¿Porque no aplicamos esa “receta”?

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