
UNA GRAN INCÓGNITA POPULAR
por BERNABE CICUTA
Tengo curiosidad. En estos últimos tiempos se ha desatado una feroz batalla contra los genocidas del proceso y como otrora lo hiciera Videla los nuevos macartistas apuntan con su dedo impoluto, no solo a los culpables comprobados sino también a sus enemigos personales o a perejiles tomados al azar.
Da lo mismo Etchecolaz, Von Wernich, Astiz que Patti, o ex policías como Luís Badalá ( ex Morio - Gran Hermano Famosos) o Juancito Gutierrez, locutor de radio en San Luís, sospechados ambos por el solo hecho de haber pertenecido a fuerzas policiales. Este último señalado como torturador por la transparente Contadora Videla del Observatorio de Derechos Humanos Sucursal San Luís, que en sus buenos viejos tiempos cultivaba con esmero armas en el patio de su casa en la calle San Martín de San Luís…?
Sería importante que con la misma minuciosidad se investigara y condenara a los “jueces” populares que juzgaron, torturaron y asesinaron a Aramburu, ¿Dónde están ahora?, ¿Fueron juzgados?, ¿Están presos? Que lindo guión para una película como La Historia Oficial”…¿no?
Me gustaría saber por que fue perseguido el arcángel Bonazo, hoy diputado y verdugo de Patti. o ¿A que se dedicaban los hijos de Hebe de Bonafini y las demás Madres de Plaza de Mayo o los nietos de Estela Carlotto y del resto de las Abuelas para que fueran perseguidos y muertos por las Fuerzas Armadas y de seguridad?
Esto no es para justificar defender a los genocidas del ejército ni de la policía, sino solo por curiosidad. Quiero conocer a fondo los ideales, los objetivos y las intimidades de esos ciudadanos públicos. Quiero conocer su biografía detallada, como se hizo con Fangio, Sandro, el Ché Guevara, Maradona, Mata Hari y tantos más. ¿No les parece que sería importante saber quienes eran, como eran y a que se dedicaban, ya que se los ha hecho tan famosos en el martirologio?
Quiero aclarar que ni yo ni mis padres ni familiares fueron o son militares o policías, solo soy un ciudadano común curioso de las actividades de los hombres que marcaron un hito en la historia de mi Patria. Soy el émulo de una pequeña plantita cuyas raíces prestaron importantes servicios para modificar la historia del mundo, a partir de la antigua Grecia.
Hasta la próxima.
BC
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