Tanto a la ida como a la vuelta los colectivos estacionan sobre la calzada.Al regreso a la Ciudad los días de calor ,bajan desde El Trapiche en una carrera de locos.Entran a El Volcán a más de 100 km,haciendo chirriar los neumáticos y así siguen ,como en un autódromo hasta J.Koslay y de golpe se encuentran con que el micro que también viajaba a lo loco frena.
Un volantazo hacia la izquierda y una serie de frenadas,maniobras ,roces ,puteadas y de todo.
¿Que va a hacer Intendente Gargiullo con esta situación?
Porque no construye estacionamientos fuera del camino y pide el auxilio de la caminera para que ponga límite a esta locura de velocidad...
Cuando a un vecino le toca cruzar el camino para tomar el colectivo pasa antes por la iglesia y reza un buen rato.
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