LAS FOBIAS POLICIALES LE ROMPIERON UN RIÑON A UN MALABARISTA
“Ahora no puedo trabajar porque no puedo hacer fuerza. Me cuesta levantarme, sentarme, alzar
a mi hijo”, expresó Ezequiel Lucero .-

Cuando la corrupción carcome el cuerpo no hay tecnología que valga.Todavíano pueden saber cuales móviles intervinieron en este crímen todavía impune.- ¿Uno más?
LOS ADICIONALES SON LA ESCALERA PARA LA COMPLICIDAD CON LA MAFIA
"El inspector Ojeda admitió que al auxiliar Lucero –quien habría tenido un incidente con Ezequiel Lucero dentro de la disco “Morena”– lo ha visto en ese boliche, donde el auxiliar trabaja como patovica. Lucero trabajó bajo las órdenes de Ojeda en el Comando Radioeléctrico..":
El policia no puede ser empleado de nadie mas que el estado
Los adicionales es el puentesito para entrar en la complicad con trangresores o bandas delictivas.
El policia como el empleado judicial no puede estar en misa y repicando.
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Comprometedor testimonio de Ezequiel Lucero
El joven Ezequiel Lucero declaró lo ocurrido el día de la golpiza. Eran alrededor de las 4 de la madrugada, cuando el joven salía de un boliche céntrico, luego que un patovica lo sacara del lugar por estar discutiendo con un amigo.
En ese momento, salió a buscar a sus amigos y cuando se dirigía por calle Pringles, a una cuadra del local bailable, aparecieron un grupo de policías por detrás de él. Ezequiel relató que “venían de atrás, y cuando quise mirar me dijeron que no mirara y me pegaron un piña detrás de la oreja. Caí al piso y quedé inconsciente”.
Ezequiel afirmó que lo discriminaron por su forma de vestir. “Yo no soy un chorro ni un delincuente, me tuvieron que sacar un riñón y ahora no puedo trabajar para darle de comer a mi hijo”, aseguró Ezequiel.
El joven no puede identificar el número de policías que le pegaron, pero si reconoció a uno de ellos, que pudo ver mientras le pegaron, “lo había visto y lo reconozco de antes”, dijo el joven.
Lucero se recupera paulatinamente y se encuentra haciendo reposo en su casa, luego que le otorgaran el alta hospitalaria. Manifestó que se siente mejor tanto física como psicológicamente, pero sufre las secuelas que le dejó la intervención en la cual le extrajeron el riñón izquierdo. “Ahora no puedo trabajar porque no puedo hacer fuerza. Me cuesta levantarme, sentarme, alzar a mi hijo”, expresó.
El joven pidió al Gobernador y a la gente “que me escuche y que se haga justicia, porque le puede pasar a cualquiera”. Junto con la familia, están planeando hacer una marcha, pero aún no dieron más detalles.
La causa judicial está en manos del abogado. La investigación apunta a identificar a los oficiales del Comando Radioeléctrico que dieron la golpiza esa madrugada. Los testigos que presenciaron el hecho, de acuerdo a las versiones de Ezequiel, tienen miedo de declarar y aportar a la causa. Lucero aún no prestó declaración pero se espera que lo haga en esta semana.
Escuchado en Radio Ciudad
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