DOLORES.- Para saber por qué mataron al fotógrafo José Luis Cabezas, el juez José Luis Macchi interrogó ayer a Gabriel Michi, compañero del reportero gráfico en la revista Noticias durante la cobertura informativa de la temporada en Pinamar.

"Que a nadie le quepa ninguna duda de que a José Luis lo mataron por su trabajo. El abogado de Gregorio Ríos (Jorge Fiscalini) me preguntó sobre unos llamados a una farmacia en Río Negro y otra en Pinamar, a donde José Luis llamaba habitualmente porque tiene amigos. En todo momento intentó demostrar que lo mataron por una cuestión pasional", expresó Michi, luego de prestar declaración.

"Quiero pasarle el peine fino a la investigación, así que me gustaría que me diga si en estos ocho meses recordó algo nuevo que pueda ayudarnos a resolver el caso", le dijo el juez Macchi al compañero del fotógrafo asesinado el 25 de enero último, en Pinamar.

La cuarta declaración testimonial de Michi ante el magistrado se produjo cuando restan diez días para que caduque el plazo en el que debe resolver si le dicta la prisión preventiva a Ríos, acusado de ser el presunto autor intelectual del crimen del reportero gráfico.

De esta forma, Macchi intenta reunir todas los elementos necesarios en caso de tener que fundamentar la resolución de un posible procesamiento del jefe de la custodia de Alfredo Yabrán. Según las fuentes, la decisión podría demorar unos diez días más.

NO HAY TECHO

Por otra parte, en la Jefatura de la Policía Bonaerense, en La Plata, el comisario mayor Víctor Fogelman, aseguró: "Creo que decir a esta altura que Gregorio Ríos es el tope de la investigación me parece demasiado aventurado. Estoy convencido de que la pesquisa no está terminada".

En esta misma línea, tomó mayor importancia para los investigadores la esperada declaración de Alejandro Esganian, el ex secretario de prensa de la Municipalidad de Pinamar, quien, según Gabriel Michi, "entre el 14 y el 20 de diciembre le advirtió a José Luis que gente de Yabrán pretendía averiguar su domicilio en Buenos Aires".

Según fuentes judiciales, el ex funcionario, que debía presentarse anteayer en el juzgado, viajará esta semana desde Santiago de Chile, donde se radicó un mes después del crimen, para declarar ante el magistrado.

EL PUERTO DEPORTIVO

"Antes del crimen, nosotros tratábamos de conseguir una nota con Yabrán. Lo intentamos a través de Luis Abruzzese, el ex secretario de Turismo de Pinamar y hombre del entorno del empresario. Unos días antes habíamos hecho con él una nota sobre la construcción del puerto deportivo en el balneario", recordó el redactor amigo de Cabezas.

"En ese momento, Abruzzese admitió, por primera vez, que Yabrán estaba detrás del proyecto que, curiosamente, daría dos millones de dolares de pérdida, pero explicó que la ganancia radicaba en el negocio inmobiliario", señaló Michi.

Sobre la supuesta advertencia de Esganian a Cabezas, hace más de dos meses se había referido el propio Abruzzese, quien sugirió que "la dirección de Cabezas la pudieron estar averiguando para mandarle una invitación para la inauguración del hotel Arapacis, en Pinamar".

El hotel en cuestión pertenecería a Alfredo Yabrán, según diversas fuentes. "Lo curioso del caso es que todos sabemos que ese tipo de invitaciones se envían a los medios en los que uno trabaja, nunca a los domicilios particulares", concluyó Michi.

DENUNCIAN UN PACTO

DOLORES (De un enviado especial).- Tres legisladores provinciales del Frepaso, integrantes de la Comisión Bicameral de Control y Seguimiento de las Investigaciones del asesinato de José Luis Cabezas, denunciaron que el presidente Carlos Menem y el gobernador Eduardo Duhalde "pretenden una investigación del crimen, sin control y con límites".

Además, los diputados Eduardo Oliver y Alejandro Mosquera, y el senador Eduardo Sigal, criticaron a sus colegas del Partido Justicialista por no dar el quórum para que la comisión pueda funcionar.

"Hace más de dos meses y medio que no hacemos nada porque los legisladores del justicialismo no bajan para tratar los temas relacionados con la pesquisa y con todas las irregularidades que han quedado al descubierto, como el encubrimiento policial, la aparición de testigos para favorecer a Yabrán y el caso del ex informante Redruello, sobre quien no nos cabe ninguna duda de que fue plantado para desviar la investigación", expresó el diputado Mosquera.

Los tres legisladores recordaron el "pacto de no agresión entre Menem y Duhalde desde junio último respecto del caso Cabezas" y que los diputados del justicialismo "nunca fueron permeables a la hipótesis que apuntaba la atención de los investigadores hacia la pista Yabrán y policías de la Costa".

La actual inactividad de la comisión, contrasta con la celeridad que le había impuesto a las acciones durante los primeros meses cuando citaba a te